Mirada a Distancia

Aristegui: el gran reto de los periodistas es su propia organización

Por Inés García Nieto.

Hoy como ayer, en la mayoría de los casos, el periodista es el último eslabón en la cadena de la comunicación, aseveró la segunda mujer más poderosa de México, según investigación de la revista Forbes, Carmen Aristegui.

Aristegui, orgullo del periodismo mexicano

La comunicadora que por veracidad y valentía ha recibido dos veces el Premio Nacional de Periodismo, y recientemente el reconocimiento a la Libertad de Expresión y Defensa de la Palabra, de parte de la organización Pen Club México, dijo lo anterior en el Segundo Encuentro Nacional de Periodistas.

El periodista, el último eslabón de la cadena de la comunicación.

El periodista, el que investiga, el que escribe, el que se arriesga, es el último…

¿Qué circunstancias hacen que Carmen Aristegui opine de esta forma?

La titular de la primera emisión de MVS Noticias y entrevistadora de CNN Español, inició la plática “El periodismo en México”, diciendo a los 150 periodistas procedentes de 22 estados de la República Mexicana:

Aprovechemos este espacio para vernos las caras, escucharnos y saber qué ocurre allá, de dónde ustedes vienen. Este breve ejercicio de retro alimentación,  nos ayudará a encontrar respuestas a esa larga lista de desafíos y retos, pues todos sabemos que el periodismo vive momentos de violencia e impunidad.

El primer punto de análisis abordado por la sagaz entrevistadora, fue el de la individualidad que caracteriza a este gremio.  

Observó y continuó:  

La naturaleza del oficio, el hecho de que el periodista busque la exclusividad día a día para informar a sus lectores o audiencia, hace que “cada quien jale para su molino” pero es tiempo que el gremio responda de manera consistente, más organizado e inclusive sincronizado, en casos de agravios a informadores.

Aristegui, quien se iniciara profesionalmente en Canal 13 de Imevisión –hoy de TV Azteca-, lamentó no haber sido informada por los periodistas del norte del país, sobre la agresión que sufriera el corresponsal de La Jornada, Antonio Heras, y puntualizó:

La circunstancia más adversa para hacer periodismo en México, sin lugar a dudas es la violencia. Ésta, expresada en persecución, muerte, amenaza y hostigamiento, se ha traducido en una larga e impune lista de periodistas asesinados o que se encuentran en condiciones de vulnerabilidad por los poderes locales.

Opinó que ello es un asunto grave, porque acota o aniquila la libertad de expresión, y cuando se mata a un periodista, se aniquila el derecho fundamental de la sociedad a estar informada.

Carmen Aristegui, la periodista que en 2002 fue reconocida por el Centro Mexicano de Filantropía, y en 2010 recibió la “Presea Sor Juana" por la  Universidad del Claustro de Sor Juana, pregunta a los atentos comunicadores del país:

¿Cómo hacer frente a esa agresión? ¿Con qué herramientas reales contamos cómo gremio? ¿Por qué no hemos podido unirnos en tiempos inciertos? ¿Será que aún falta mucho para que los comunicadores hagan valer la comunicación en su favor, y replicar el agravio a nivel nacional de manera inmediata?

Tras haber conocido las experiencias de informadores procedentes de Yucatán quienes dijeron que pese a las denuncias de los periodistas lesionados durante el ejercicio de su actividad no han sido atendidos por las autoridades judiciales; los testimonios de Michoacán, Puebla y el caso de un periodista desplazado de Tamaulipas, Aristegui dijo:   

Esas experiencias deben llevarnos a reaccionar más consistente como gremio, y a la vez enlazarnos con otras agrupaciones periodísticas. Debemos expresarnos de manera mucho más amplia, solidaria y contundente porque si no nos unimos, mostramos debilidad, y esa debilidad hace que los agravios queden en la impunidad.

Opinó:

“No hemos logrado hacer que los agravios de los periodistas sean los agravios de la sociedad, y que la sociedad los vea como una afectación a sus derechos ciudadanos, porque un periodista muerto es un derecho fundamental asesinado.

La comunicadora invitada por la asociación civil de reciente creación denominada Casa de los Derechos de los Periodistas (CDP), indicó que el Estado ha informado a la sociedad  de la creación de instancias para proteger al informador, pero  ¿qué pasa con ellas, funcionan, en qué casos?

Precisó que la especificidad del periodismo sí justifica que haya una acción del Estado para proteger esa tarea, pues por la naturaleza de la profesión que implica buscar información, hurgar y señalar a los poderes, es necesario proteger a ese gremio que tiene alto rango de riesgo frente al propio poder.

Otra reflexión hecha por Aristegui, es ver si el dinero público que se destina a esas instancias a favor del periodista, realmente está siendo utilizado para ello. ¿Qué deberíamos exigir los periodistas y cómo hacerlo?

En este encuentro se conoció la experiencia de un periodista desplazado, quien recurrió a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) de la PGR, y a la Subdirección de Atención a Defensores y Periodistas de la Secretaría de Gobernación, quien comentó sentirse bajo amenaza aún fuera de la entidad, por la inseguridad en que se encuentra la casa que le fue asignada como resguardo.     

Una reflexión obligada por la periodista que el sábado 18 de enero cumplió 50 años, es la que surge de un poder más sutil y tan eficaz como los otros, el del dinero. Dijo que ese poder conduce a los dueños de los medios a la autocensura, a limitar la libertad de expresión, y en el caso de los periodistas los lleva a omitir información con tal de no perder el empleo.

Esa situación debe ser revisada, declaró Carmen Aristegui, pues los recursos son públicos y muchas veces se otorgan para premiar o castigar a los medios, según convenga al propio poder político.

En este punto, recordó la prestigiada  entrevistadora en MVS y CNN Español, el gobierno actual, en campaña, prometió regular el dinero asignado a los medios de comunicación, porque el ambiente está enrarecido.

Dijo que cuando un dueño de periódico o un concesionario le dice a su periodista: “Con este gobierno no te metas porque está financiando la nómina”, ese ingrediente incide en la línea editorial o la información del medio.

El mecanismo de la publicidad es absolutamente eficaz para modular y achatar la línea editorial y la libertad de informar de los medios. ¿Dónde está la exigencia de los periodistas para recordarle al poder político que tiene un compromiso de regular los recursos públicos para publicidad?

Dar o quitar recursos públicos a los medios debe ser transparentado, debe exigirse. Si se va a dar dinero público a los medios de comunicación, debe saberse a quién, por qué y bajo qué razones, porque los medios tienen derecho de recibir publicidad, sino ¿de qué van a sobrevivir?    

Todos sabemos que el dinero utilizado en los medios de comunicación  tiene el fin de controlar la información. Sabemos que la asignación de recursos públicos es arbitraria, es discrecional y corresponde a una vieja época, nunca ida, donde la prensa y los periodistas no han sido exigentes en que se cumpla lo que se prometió.

Carmen Aristegui mencionó que la promesa del presidente Enrique Peña Nieto, no surgió en una buena tarde, sino de un cuestionamiento profundo hecho en plena campaña, donde se recuerda la frase: “Si la TV hiciera presidentes”.

Peña Nieto puso el dedo en la llaga y se comprometió a reglamentar los dineros públicos destinados a publicidad, cosa que no ha ocurrido.

Exponer esta situación a la sociedad, remarcó, es urgente, porque el gran reto de los periodistas es comunicarse con la sociedad. Esta realidad no solo afecta el trabajo del periodista sino también los derechos de la ciudadanía a saber, a tener espacios críticos y de debate, y a analizar  con libertad lo que es de interés social y nacional.

Dijo finalmente Carmen Aristegui:

Yo creo que los grandes retos de los periodistas son organizarse como gremio para actuar consistentemente en casos de agravio, publicar las noticias que no puedan ser difundidas en un medio – para inhibir la censura-, y hacer investigaciones en conjunto, para que la información salga con fuerza a desarmar al ente exhibido y denunciado.     

MVS Noticias, el noticiero donde labora Carmen Aristegui, es transmitido por el canal 52MX y por internet. Es replicado en varias estaciones de radio de la República Mexicana, y además Aristegui tiene un portal en internet llamado Aristegui Noticias.

Los organizadores del Segundo Encuentro Nacional de Periodistas realizado en la ciudad de México fueron la CDP; Comisión de Derechos Humanos del DF; Universidad de la Ciudad de México y la organización Freedom House.

Estuvieron los periodistas Ioan Grillo, corresponsal de CNN y Time, Johanna Tuckman, corresponsal del diario inglés The Guardian; Anabel Hernández, escritora del libro “Los señores del narco” y “México en Llamas”; José Reveles, periodista de la revista “Proceso” y Miguel Badillo, director de la revista Contralínea.

También estuvo la periodista Rosario Avilés, Sara Lovera, Amado Avendaño, los moneros El Fisgón, Hernández, Helguera y Manrique; Jorge Meléndez, Rogelio Hernández, Jorge Luis Sierra, especialista del Knight International Journalism Fellow, Gerardo Albarrán de Alba, Isaín Mandujano; Rogaciano Méndez del Sindicato de Redactores de Prensa; Balbina Flores, corresponsal de Reporteros sin Fronteras, y Manuel Fuentes, de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos.        

Investigación de la revista Forbes, ubica a Carmen Aristegui después de la ministra de la SCJN, Olga Sánchez Cordero, quien está a la cabeza como la mujer más poderosa de México.